Hace sol

Hoy no vengo a contaros historias tristes. A veces, por casualidad suena un silbido, y no te das cuenta de que más tarde que pronto tu vida va a cambiar, quizá no quise hacer caso al motivo de que pasase tanto tiempo leyendo tus palabras, tus respuestas, opiniones...tú dices que cotilleo, yo digo que recaudo información. Quería conocer, porque tenía que haber algo más, no te confundas, no hago esto con nadie, hasta que llegaste . Por aquel entonces yo...supongo que me tenía olvidada, nadaba en aguas turbias esquivando un remolino que cada día me quitaba las ganas, que cada mañana se me hacía más pesada que la anterior, pero encontré quizá una vía de escape, puede que de primeras fuese simple distracción, después algo más. Creo que el punto de inflexión fue la despedida más seca que pude escribir en siglos, el filtro funcionaba bien contigo, aunque...no lo he confesado, pero esperaba que volvieses, esperaba no, esa no es la palabra...se me revolvían las campanillas...