8/26
Hoy hace ocho veintiséis de febrero. Desde entonces han pasado muchas cosas, he respirado aliviada me he quitado una carga que creí haber convertido en parte de mi ser para siempre y me he convertido en quien jamás creí llegar a ser. Es este día en el que pienso cada vez que el mundo se me viene encima y creo que no podré llegar al siguiente valle. Es el 26 de febrero cuando recuerdo que hemos estado peor y hemos llegado a puerto. No diré que desde entonces no he vuelto a caer en pozos de los que antes creí no ser capaz de salir porque la marca de mis dientes en el brazo dice lo contrario, y sigo siendo incapaz de gestionar nada sin estar un rato debajo de la mesa - como si tuviese 7 años y siguiese buscando un hueco donde nadie me encontrase - Mentiría si no dijese que a veces pienso que reproduzco comportamientos de perrito abandonado, cuando a otros me queda pequeño el mundo. Supongo que son vaivenes con los que hay que lidiar, nada tan grave, nada tan hondo, sé navegar....